sábado, 28 de agosto de 2021

RESIGNIFICAR LA CULPA DEL PLACER FEMENINO

Hermana (Placer)

María Folguera

Alianza Editorial, Madrid, 2021, 190 páginas.

 

    

 

   Con una historia basada en hechos reales, María Folguera, escritora, dramaturga y gestora cultural, nos invita a reflexionar sobre el placer femenino y sobre su castración a lo largo de los años,  sacando a luz lo que callaron mujeres como Elena Fortún, Rosa Chacel, Carmen Laforet, Zenobia Camprubí o Teresa de Jesús. Un propósito que tuvo su inicio en su juventud cuando comprendió que todas las referencias y ejemplos estaban marcadas, no por el deseo, no por el placer, sino por la renuncia, la ocultación, el sacrificio, y en definitiva, el fracaso como mujeres. Frente a esta herencia recibida del pasado y que la autora no quiere que se convierta en canónica, escribe una novela que entiende como la “Enciclopedia de los Buenos  Ratos de las Escritoras”.

   La novela se sustenta en dos protagonistas antagónicas: una es el paradigma del arraigo, la otra del nomadismo. No obstante son amigas, aunque lleguen a envidiarse. Una de ellas significa método, orden, la visión más inalterable de la vida. La otra necesita evadirse, escapar, y aunque se aventurase a hacer cosas con más arraigo, jamás las convertirá en efectivas. Todo ello inspirado en una amistad y en un personaje real que es Julia de Castro.

   La novela se inicia con un sueño en buena medida surrealista, cuyo final la narradora ignora. Esta narradora, alter ego de la autora, se sirve de este sueño para perfilar varios elementos de la novela, una novela enteramente confesional, dirigida a una tercera persona cuyo nombre nunca nos es revelado. El lector identificará sin gran esfuerzo a esta persona, también protagonista de la novela, como Julia de Castro. Pronto aparece en la narración Elena Fortún, autora de éxito que oculta muchos secretos y gran referente en la novela. La narradora decide avanzar en su “Enciclopedia de los Buenos Ratos de las Escritoras”. de las escritoras del canon literario, que más que canon es un martirologio para recuperar, no sufrimientos o suicidios, sino momentos de triunfo: los momentos en los que las escritoras lo pasaban bien.

   El primer ejemplo es el de Rosa Chacel, en cuya figura ve más represión que buenos momentos. El patetismo del encierro y la vigilancia social serán el denominador común de la las mujeres que tienen cabida en la Enciclopedia. Continuará con Teresa de Ávila que identificaba el alma como un castillo, como un encierro.

   Secuencias intermedias que hablan del placer de la protagonista y de los de su amiga, Elena Fortún, y de la obra de teatro en la que aparecen María Lejárraga, Carmen Laforet y diversos personajes ficticios.

   Y entramos en la espiral de la negación del placer: desde Elena Fortún que afirma que los dulces ensucian el estómago y, por eso, los mayores ponen restricciones a los placeres gustativos. Elena Fortún y su secreta identidad bollera que la perseguirá sin tregua, María Lejárraga, diputada socialista, que redacta discursos sobre la emancipación de la mujer, pero que firmaba su marido. Ella prefería ser el reverso, conoce las ventajas de ir a la zaga, debido al romanticismo de enamorada, entre otras razones. Otro personaje que participó en todas las amarguras del liderazgo y del peligro inquisitorial fue Teresa de Jesús. También Carmen Laforet que con Elena Fortún celebraban la mutilación del deseo.

   

                                   

                                           María Folguera
 

 La novela, en definitiva, es la historia de una relación entre la protagonista y Elena Fortún. Una larga amistad de diez años. Y es, al mismo tiempo, la historia de mujeres que se arrepienten de sus pasadas incursiones en la felicidad y en el atrevimiento. Para muchas mujeres nunca hubo esperanza de combinar cuidados, escritura y goce de la vida. Mujeres que consideraban el placer como algo egoísta. Novela basada en hechos reales, en biografías filtradas por la ficción, con no pocas secuencias de ensayo.

 

Francisco Martínez Bouzas

 

domingo, 22 de agosto de 2021

TERROR EN EL CABO DEL MUNDO

El Cabo del Mundo

Xabier Quiroga

Ediciones B, Barcelona, 2018, 440 páginas

 

   

 

 

    Xabier Quiroga es en la actualidad uno de los narradores en lengua gallega más prolificos, autor además de obras extensas. Como muestra, El baile de los estorninos recientemente publicada y sus 795 páginas. El Cabo del Mundo, editada en gallego en el año 2005, fue Premio de la crítica de narrativa gallega, y junto con la obra mencionada y Izan o da saca, son obras narrativas centradas en la guerra y posguerra española en Galicia.

   Es una de las formas de cómo la ficción gallega está desterrando el manto de la desmemoria, permitiendo así que salgan a la luz, muchos acontecimientos pesarosos de nuestro pasado franquista. La justicia que nunca se hizo con los que se rebelaron, con los torturadores, con los agentes del terror, la está asumiendo la literatura de forma ficcional, pero sin faltar a la verdad, y, tal como se afirma en las primeras líneas de la novela de Xabier Quiroga, siendo conscientes de que los hecho que no se recuerdan es como si no hubieran acontecido. De ahí la coherente necesidad de la llamada Memoria Histórica. A dicho propósito se sumó, de una forma original y disimétrica la llamada narrativa de tipo social, y en concreto la novela de Xabier Quiróga El Cabo del Mundo,  hace tres años.

   El autor nos ofrece una historia y una trama narrativa que, desde el presente y de forma alejada de todo maniqueísmo, intenta investigar en aquellos desgarradores días del años treinta y seis, en los que la barbarie represiva acabo siendo ocultada por el andancio de una guerra sin frentes bélicos en Galicia, pero marcada por el terror en una doble vertiente: las de los juicios , una farsa preparada en forma de venganza y que el autor denomina “paralegal”, ejercida por los escuadrones de la muerte de falangistas y asimilados, a través de los conocidos como “paseos”, “sacas”, y la actuación de “las patrullas del amanecer”.

   Esta labor de investigación y de la que se apropia un profesor diagnosticado de cáncer terminal, roto por la vida y derrotados en sus sentimientos, que no enterró a su padre, escucha cómo alguien grita: “Adiós asesino”. Desde ese momento, consciente de que tiene las horas contadas, intenta desesperadamente resolver dos dudas: descubrir en primer lugar si su padre había sido o no un asesino, y saber si la mujer a la que siempre amo, lo ama igualmente.

   La indagación lo lleva a investigar compulsivamente en los libros de historia y en la memoria de los vivos para desvelar lo que había pasado en una cantina ribereña una noche de julio del años 1936, situada en un recoveco del Miño, conocido como “Cabo del Mundo”. Sin embargo se encuentra con el hecho de que las clases dominantes, los “señores del olvido”, promoverán la pérdida de la memoria colectiva y la eliminación de toda documentación oficial de las huellas del terror.

                                       

                                       Xavier Quiroga

 

   La narración se convierte entonces en un verdadero relato detectivesco, en el que incluso entra en acción un improvisado Holmes, y tiene el mérito de ahondar, desde el punto de vista ficcional, pero con base en datos documentales, en la represión falangista en el sur de la provincia de Lugo.

   Una estructura arquitectónica fácilmente habitable por el lector y que permite que la acción avance de forma dosificada, una verdadera inmersión en la Galicia profunda y un estilo de prosa elaborado, pero que reproduce cuando es necesario el gallego oral, a veces muy basto y expresivo, contribuyen a darle verosimilitud a esta historia de terror en rel Cabo del Mundo.

 

Francisco Martínez Bouzas

 

miércoles, 18 de agosto de 2021

VIAJE A LAS ZONAS MÁS ABISALES DE LA HUMANIDAD

Si esto es un hombre

Primo Levi

Traducción de Pilar Gómez Bedate

Editorial Península, Barcelona, 2018, 224 páginas.

 

   

 

 

    Si esto es un hombre inaugura la trilogía que Primo Levi (1919-1987) dedicó a los campos de concentración y exterminio nazis. Nacido en el seno de una familia liberal judía, tras graduarse en Química, sufrió, debido a las leyes raciales de la Italia fascista, muchas dificultades para encontrar trabajo. En 1943, con unos compañeros salió al campo e intentó unirse a la resistencia antifascista italiana. Pronto fue arrestado debido a su inexperiencia por la milicia fascista que lo entregó al ejército de ocupación alemán. Se identificó como judío lo que le salvó de ser fusilado inmediatamente. En febrero de 1944 fue deportado e internado en Monowice,uno de los campos de concentración que formaban el complejo de Auschwitz, en la Polonia ocupada por las nazis. Allí pasaría diez meses antes de que el campo fuera liberado por las tropas del Ejército Ruso. De los 650 judíos italianos que habían ingresado en el campo, fue uno de los veinte afortunados que sobrevivió al exterminio. De vuelta a Italia ejerció como químico industrial en Turin hasta el año 1977 en que se dedicó a escribir a tiempo completo.

   Cuestion compleja es la de su muerte / suicidio, el 11 de abril de 1987. Levi se precipitó por el hueco de la escalera de del tercer piso donde vivía. No dejó ninguna nota, si bien algunas biografías publicadas a posteriori explican este hecho como una consecuencia de las heridas abiertas en su estancia en Auschwitz..

   Si esto es un hombre, surgió en la imaginación del autor durante los días de horror de Auschwitz, cuando la principal preocupación de los prisioneros era que, de sobrevivir, nadie creería la atrocidad de la historia vivida. Los campos de concentración y exterminio, más que resguardados por las alambradas y guardianes, lo estuvieron por su propia monstruosidad que los hacía inconcebibles.

   La sobriedad del testimonio de Primo Levi, en Si esto es un hombre, una víctima que no grita, pero arranca el grito de la garganta del lector, lo convierte en un clásico de la literatura del Holocausto. Publicado en 1947 no añade, sin embargo nada nuevo sobre las atrocidades cometidas en los campos de concentración y exterminio. No fue escrito, afirma Primo Levi para formular nuevos cargos de acusación, sino para repeler la infección latente en muchos seres humanos de que “todo extranjero es un enemigo”. Cuando esto ocurre, al final está la amenaza y la realidad del Lager.

   Primo Levi, en un texto con marcado carácter fragmentario -capítulos escritos sin sucesión lógica- narra su propia historia de judío y partisano capturado por los fascistas en diciembre de 1943, e internado en Fossoli; y desde allí transportado con otros hebreos a Ausvhwitz donde que eran divididos entre los válidos e inválidos para el trabajo. Lo segundos eran eliminados de inmediato, los primeros, recluidos en los campos de concentración de Auschwitz, donde les tatúan un número que acelera el proceso de despersonalización.

   Primo Levi narra cómo afronta los problemas de convivencia, los peligros de los bombardeos, las dificultades derivadas del frío, el aumento de los hornos crematorios. La historia concluye, como ya quedó señalado, con la huída de los alemanes y la llegada de las tropas rusas que liberan a los prisioneros.

   

                                

                                                  Primo  Levi

 

    En el relato del día a día de Primo Levi y de sus compañeros prisioneros, cobran especial relevancia la descripción de la cotidianeidad frustrante, la resistencia y firmeza de los seres humanos en este viaje a las zonas más abisales de la humanidad. Lejos de ser el relato de la supervivencia heroica del protagonista, Primo Levi  habla de la suerte y de la situación de privilegio que le permitió gozar gracias a su graduación en Química.

   La liberación interior y el deseo de contar su terrible experiencia constituyen la modadalidad con la que Primo Levi testimonia, y a la vez nos interroga sobre lo que habríamos hecho en una situación semejante. Un libro pues que es un imperativo ético y vital para que no desviemos la vista hacia un lado ante cualquier señal de peligro.

 

Francisco Martínez Bouzas

 

lunes, 16 de agosto de 2021

EL FEMINISMO DE ARTEMISIA GENTILESCHI

Anibal e a Pintora

Xabier Paz

Edicións Xerais, Vigo, 2017, 376 páxinas

 

 

   A raíz de la publicación en Facebook del cuadro “Lucrecia” de la pintora italiana del siglo XVII, Artemisia Gentileschi, que tras ser violada se vengó haciendo arte feminista, se suscitó un pequeño debate sobre el posible o improbable feminismo de Artemisia Gentileschi. Para ilustrar la vida de Artemisia recupero la reseña de la novela de Xabier Paz  Anibal e a Pintora, basada en hechos reales pero, ficción al fin y al cabo. Como novela, el autor inyecta ficción en la realidad histórica. Según el “dictum” de Álvaro Pombo, tan pronto como se ficcionaliza un contexto histórico, todo él queda sometido a las leyes de la ficción.

   Nos agasaja una vez más Xabier Paz con una novela histórica porque los personajes históricos, piensa el escritor, son como un molde en el que se pueden verter todos los problemas del ser humano. Una novela, Anibal e a Pintora, que es el segundo escalón de la trilogía de la novela histórica italiana que da comienzo con Renacer que prosigue con la recuperación de la biografía novelada de la pintora Artemisia  Gentileleschi y que  finaliza con Galileo como figura en la que se refleja la Contrarreforma y sus efectos.

   La figura histórica de Artemisia es el renglón sobre el que escribe Xabier Paz. Nos acerca a la figura de esta mujer contándonos las aspiraciones de un personaje inventado. Anibal Moreda, alter ego del autor. Estimulado por la reproducción de un óleo, “Sussana e i vecchioni” que Artemisia había pintado con 17 años, decide investigar lo que hay de verdad o de falsedad en la vida de esta pintora del siglo XVII. Artemisia Gentileschi fue una pintora nacida en Roma que alcanzó el privilegio, vedado a las mujeres, de entrar en las Academias de Pintores de Florencia y de Roma, recibir el insólito encargo para su tiempo de pintar dentro de un templo, venciendo así el sentir de la Iglesia que consideraba impúdicas las pinturas hechas por mujeres. Fue además sujeto de una intensa vida novelesca en la que en ocasiones fue víctima y otras veces una mujer dotada de un fuerte carácter.

   Si algo destaca la novela de Xabier Paz es que Artemisia fue una mujer que se sostuvo con la pintura en un mundo de hombres, víctima de un padre que para ella actuó como un lastre y un represor. Violada por su profesor de perspectiva que acto seguido la convierte en amante durante meses, tras la falsa promesa de matrimonio. Sufre estoicamente el tormento de la sibilla para probar delante del tribunal papal la verdad de su denuncia. Casada por el padre con un hombre banal y florero, consentidor de los  amores de su mujer con un rico mecenas. Dependiente siempre de comitentes y valedores, ejercerá su arte en Roma, Florencia, Venecia, Nápoles y Londres.

   En feliz relación, a pesar de que durante mucho tiempo había sido analfabeta, con Galileo, Cristofano Allori, Michelangelo Buonarroti el Nuevo, pintó hasta la extenuación, sobre todo cuerpos femeninos, ya que los comitentes  querían ver cuerpos de mujeres desnudas e imaginadas por otras mujeres. Serán mujeres violadas o seductoras como ella misma, abriendo así un camino vedado para las mujeres. He aquí el principal motivo de su feminismo del siglo XVII: hizo como mujer lo que estaba reservado a los hombres. De intensa vida sentimental, pinta seres femeninos no plácidos, sino transidos por una emoción transcendente y dotados de  cuerpos explícitos y bien dotados.

   Con todo, lo mejor de la pieza narrativa de Xavier Paz es el gran fresco, ampliamente documentado, de la Italia barroca, con el Gran Teatro Contrarreformista heredado del gran torbellino de Trento. Una Roma tardorrenacentista, repleta de fiestas públicas; también de ejecuciones como las de Giordano Bruno y Beatriz Cenci; el esplendor cultural y artístico de la Florencia de los Médici; o el Nápoles de los untori y de la peste.

    

                                    Sussana e i vecchioni

 

No tienen menor relieve en el desenvolvimiento del relato las frecuentes écfrasis, ese ejercicio literario en los que al autor describe los cuadros de Artemisia y de otros pintores. Así como las planas puntuadas por la fuerza intelectual y artística de la Italia tardorrenacentista, con Galileo, por ejemplo, explicando las teorías del movimiento.

   Artemisia como Galileo se esforzará en desvelar las propias sombras, aunque los dos violenten sus conciencias en los lances decisivos de sus vidas. En no pocas secuencias, subraya el autor el coraje feminista de Artemisia: se siente orgullosa de ser mujer que se hizo a sí misma, y no puede evitar la rabia contra la herencia de Trento y de su época cuando lee en un libro piadoso, escrito por el cardenal Belarmino, que el hombre es más noble que la mujer que se halla comprendida en el mismo. Un caudaloso conocimiento de las técnicas pictóricas y una prosa rutilante y poderosa visten esta incursión de Xabier Paz en los territorios históricos y ficcionales de la Italita postrrenacentista.

 

Francisco Martínez Bouzas