martes, 3 de septiembre de 2024

UN TORRENTE DE HISTORIAS MALDITAS

Te di  ojos y miraste las tinieblas

Irene Solà

Editorial Anagrama, Barcelona, 2023, 168 páginas.

 

      Te di ojos y miraste las tinieblas es la tercera incursión de Irene Solà  en la narrativa de formato largo. Publicada a la vez en catalán y castellano. En esta novela nos aproxima la autora a una ascendencia genealógica de mujeres que habitan en Mas Clavell, un lugar remoto de las Guilleries. Sobre Joana, la matriarca recae el convencimiento de haber creado en su descendencia la maldición, por haber entregado su alma al diablo a cambio de un hombre.

   Hago propia la sinopsis que de la novela nos ofrece  Anagrama, debido a su perfección: “Escondida entre riscos lejanos, en algún remoto lugar de las Guilleries transitado por cazadores de lobos, bandoleros, emboscados, carlistas, hechiceras, maquis, pilotos de rally, fantasmas, bestias y demonios, el Mas Clavell se  agarra al suelo como una garrapata. Es una casa, sobre todo, habitada por mujeres, y donde un solo día contiene siglos de recuerdos. Los de Joana, que para encontrar marido hizo un pacto que inauguró una progenie aparentemente maldita. Los de Bernadeta, a quien le faltan las pestañas, y que, de tanta agua de tomillo que le vertieron en los ojos de niña, acabó por ver lo que no debía. Los de Margarida, que en vez de un corazón entero tiene uno de tres cuartos, rabioso. O los de Blanca, que nació sin lengua, con la boca como un nido vacío, y no habla, solo observa. Estas mujeres, y más, hoy preparan una fiesta:”

   Una “cascada de historias”, cuya idea principal, en palabras de la autora, tiene mucho que ver con el folclore regional, el imaginario visual y la tradición oral que se generan en torno al pacto con el demonio. Pero no sólo con este pacto: en la novela, la autora ahonda en el pacto narrativo, en ese contrato implícito que se establece entre el emisor de un mensaje narrativo (el autor) y cada uno de sus receptores, mediante el cual, como lectores, aceptamos determinadas normas para una cabal comprensión del mismo. En efecto, mientras dura nuestra lectura de la historia, como receptores, apagamos las alarmas de la incredulidad.

   La novela es efectivamente un torrente de historias, un afluente incontenible de personajes malditos que viven o vegetan en un lugar remoto, escondido entre los riscos abruptos de las Guilleries, territorio de cazadores de lobos, bandidos, emboscados, hechiceros, maquis, fantasmas, bestias y demonios. La novela, como apunta la sinopsis, nos pone delante de una curiosa saga familiar, cuyas protagonistas son mujeres.

   Un pacto con el demonio marca y regula esa saga femenina. Todas las mujeres están muertas, pero a pesar de ello, siguen habitando Mas Clavell, la masía aislada, llevando una vida normal, y sobre todo recordando épocas anteriores en las que vivían rodeadas de lobos, bandoleros o maquis, y creyéndose ellas mismas fantasmas. Por eso, la voz narrativa las sitúa en la ultratumba, en el lado de los muertos. El espacio temporal en el que transcurren los hechos narrados es de un solo día, y en ese tiempo cohabitan vivos y muertos.

   El libro tematiza muchas otras cosas, por ejemplo el placer de los cuerpos, la violencia y la tortura, olores, malos olores especialmente, texturas. Y constantes dualidades: suerte e infortunio, tener olfato y carecer de él… Sus protagonistas son todos mujeres que jamás interpretaron ninguna historia porque son viejas feas…muertas. En la novela predomina la muerte, aunque convive con la vida. Es otra dualidad. Se habla del placer de los cuerpos, pero también de lo contrario: de la violencia y la tortura; de las tinieblas que acaban convertidas en espacios de libertad.

   Como una cascada, a borbotones llenos de palabras así es el estilo de esta novela, cercano al realismo mágico, en la que la autora se sirve de una arquitectura muy original: concentrado el relato en un solo espacio y en un solo día, pero con miles de recuerdos. Todo ello genera una encomiable cadencia rítmica con la que los lectores, amantes de tonalidades profundas, sin duda disfrutarán.

 Francisco Martínez Bouzas

 

lunes, 23 de octubre de 2023

DE LA CATARSIS AL DRAMA

Elías Portolu

Grazia Deledda

Editorial Losada, 2022, 224 páginas.

(Libros de siempre)

 

   

 


 

   Una buena traducción nos permite disfrutar de esta novela de la escritora sarda Grazia Deledda, posiblemente poco conocida a pesar de haber sido galardonada con el Premio Nobel de Literatura en 1926. Gracia Deledda había nacido en 1871 en la localidad sarda de Nuoro, y hubo de enfrentarse a múltiples y difíciles situaciones personales, culturales y políticas, especialmente en los años anteriores a su consolidación como escritora ya que Grazia era una chicha sarda llena de inquietudes que chocaban y ponían en cuestión tradiciones, idioma y el mismo entorno en que se inició su vida. En su educación no contó además con el apoyo familiar. Al casarse y lograr otra residencia distinta de la Cerdeña natal -se instaló con su marido en Roma- y allí publicó la mayoría de sus obras entre ellas Elías Portolu.

   Poco mencionada, pese a la notoriedad que adquirieron muchos de su libros, Deledda destaca sobre todo por una escritura brillante y por su capacidad  con que representa al campesinado y a los aldeanos de una isla periférica y alejada de los centros urbanos. También por el estilo y el tratamiento de los temas que superan los tópicos del relato costumbrista rural.

    

                                              

                                          Grazia Deledda
 

 

   Elías Portolu (1903) es una de sus obras más representativas. La escritura de Grazia Deledda está todavía distante en el tiempo, pero a la vez presente con relación a los temas que se desarrollarán en el Novecento literario. Al mismo tiempo en su narrativa hay una fuerte huella del regionalismo, del naturalismo y del decadentismo. La historia de Elías Portolu se convierte en esta novela en emblema de la lucha entre la vida y la moral. Distintivo que la autora nos acerca mediante una honda introspección de la conciencia de los personajes. Elías Portolu regresa de la cárcel deseoso de iniciar una nueva vida. Pero se enamora de Maddalena, la esposa de su hermano y con ella comete adulterio. Sucumben de forma reiterada a la tentación y, tras el placer, sienten la aflicción del pecado. La mujer queda embarazada y Elías, entre angustias y dudas, se hace sacerdote: Más tarde la muerte del hombre de Maddalena y del hijo  fruto del amor incestuoso  señalan la catarsis que concluye en drama.

   En la novela no solo encontramos una historia de amor apasionado. Junto a esa historia, es fundamental la ambientación, la descripción del entorno en el que predomina una religiosidad popular, en la que no faltan las consultas a los espíritus y las oraciones. La autora refleja con maestría los conflictos internos de los personajes, las luchas entre la pasión y la visión religiosa de la vida. Sus personajes son seres vivos, al mismo tiempo ideales y reales, sumergidos en una cultura arcaica regional en evolución hacia el individualismo burgués

 

miércoles, 18 de octubre de 2023

NUEVAS FORMAS DE ORGANIZACIÓN SOCIAL

Cosmopolitas domésticos

Javier Echeverría

Editorial Anagrama, Colección Argumentos, Barcelona, 200 páginas.

(Libros de siempre)

 

  

 

 Dos hechos significativos avalan esta obra de Javier Echeverría. En primer lugar el haber logrado con ella, en su día, el Premio Anagrama de Ensayo. Y en segundo lugar el haber continuado las mismas maneras y la misma  línea argumentativa de Telépolis, diagnóstico y pronóstico de la nueva forma de organización social  que es la ciudad en la distancia. De esta forma, la originalidad analítica que le proporcionó a Telépolis un gran éxito de ventas, es una buena garantía para este estudio sobre las transformaciones radicales que, en las últimas décadas, están experimentando los ámbitos domésticos debido a las nuevas tecnologías mediáticas y telemáticas capaces de introducir el mundo en nuestros hogares.

   Es este, sin duda, una verdadera revolución doméstica. La nueva casa  que se comenzó a construir a finales del siglo XX, a la par de la ciudad en la distancia, es pues una telecasa, una cueva electrónica que ya dejó viejo, según los profetas de la “fogorótica”, el concepto de “caverna envejecida”, tal como se describían los ámbitos domésticos en los años  sesenta.

   La principal novedad de estos hogares en la distancia es la emergencia de un nuevo cosmopolitismo doméstico, en el que se confunden lo privado y lo público. Y otras dimensiones como el dinero, la ciencia, la memoria, la intimidad, el territorio… sufren modificaciones radicales.

  

                                                    

                                        Javier Echeverría

 

 Javier Echeverría evita las connotaciones valorativas con relación a esta nueva revolución doméstica. Se limita a dar fe de que las líneas evolutivas de las sociedades modernas caminan en esta dirección, y señala la posibilidad, basándose en Popper, de que las  telecasas sean casas abiertas, formas sociales abiertas al tiempo y al mundo, sin por eso alejarse totalmente del reino de las relaciones personalizadas. Son, a juicio del autor, los primeros pasos hacia un mundo que determinada razón tecnológica hace inevitable, y que solamente si logramos alejarlo de las tendencias estatales o imperialistas tendremos garantías de que la nueva variante de la humanidad -los cosmopolitas domésticos- podrán seguir propagándose.

 

domingo, 15 de octubre de 2023

UNA SUTIL DISQUSICIÓN SOBRE LA LIBERTAD

Libre                                                       

El desafío de crecer en el fin de la historia

Lea Ypi

Traducción de Cecilia Ceriani

Editorial Anagrama, Barcelona, 2023, 319 páginas.

  

 

 

    Lea Ypi (Tirana, 1979) es profesora de Teoría política en la London School os Economics, especializada en marxismo y en teoría crítica. Forma parte de una familia albanesa que sufrió la persecución y las consecuencias del régimen de Enver Hoxha que gobernó al país con mano de hierro: la Albania socialista enfrentada a la Unión Soviética, a China y a Yugoslavia. Un país que solo se sostuvo gracias a una ficción política basada en la vigilancia y en la represión.

   La autora pretende presentarnos las memorias de aquellos años a través de la mirada de una niña, más tarde adolescente, que vivió con gran intensidad el desmoronamiento del socialismo albanés. Ella tuvo la oportunidad de vivir el momento con las características especiales que le aportó la situación política de su familia, ya que su infancia y adolescencia coincidieron con el llamado “fin de la historia”.

  Por eso, con la inocencia propia de su edad, recupera de adulta el resquebrajamiento del régimen, las últimas horas de la llamada democracia popular. El planteamiento del libro va mucho más allá de la visión de Albania a finales de la década de los 80 e inicios de los 90 para convertirse en una reflexión sobre la libertad.

   La autora estructura el libro en dos grandes partes. En la primera recupera sus primeros años, su infancia hasta finales de 1990, cuando quiebra el régimen comunista de Albania. Y está narrada desde la perspectiva de la visión de una niña que en los disturbios de ese año corre hacia la estatua de Stalin buscando su protección: Stalin era un gigante de bronce, con unos pies y unas manos mucho más grandes de lo que había imaginado. Pero le había robado la cabeza. Habían decapitado su estatua al grito de libertad y democracia. Algo que la niña no entiende porque ella se siente libre. Por ejemplo, puede  elegir el camino de ida y vuelta a casa desde el colegio, es libre para comprar pipas… En la mentalidad de la niña no cabe que reclamen la libertad los que ya eran tan libres como ella.

   Su familia es reacia al tema de las protestas; siempre discutían por todo, excepto por los temas políticos. El día que abrazó a Stalin perdió la inocencia infantil y se planteó la posibilidad de que la libertad y la democracia no formaban parte de la realidad en la que ella estaba inmersa. En esta primera parte relata peculiaridades de la familia, la muerte de Enver Hoxha, pero con el convencimiento que había recibido de su profesora de moral, Nora, de que su obra (el partido) seguía viva.

   Con la ayuda del partido pudo por fin comprender que Dios no era más que una invención para atemorizarnos y hacernos depender de quienes pretendían ostentar el poder de interpretar la palabra de Dios o de explicar sus reglas. Con distintos ejemplos, la autora explica con claridad lo que creía en esa etapa de su vida: la rutina diaria de la Albania comunista y las normas y doctrinas del partido, a la vez que cuestiona la libertad de los países socialistas de Europa. Esta primera parte finaliza con un capítulo titulado “El fin de la historia” en el que narra el fin del socialismo de los países socialistas de Europa. Los que habían participado en marchas que celebraban el socialismo, en diciembre de 1990, se echan a la calle para celebrar su fin.

   La segunda parte se inicia con un capítulo en el que reconoce que el partido se había equivocado en un montón de cosas, entre ellas, en el tema de la religión. Narra además su primer viaje fuera de Albania acompañando a su abuela Nini para recuperar algunas propiedades familiares en Salónica. Ese viaje hace que en ella brote la sorpresa al ver los comercios llenos de productos, pero que ellas no podían comprar debido a la escasez de dinero.

   Sus padres pierden sus puestos de trabajo, pero se van acomodando a la nueva situación albanesa, a la vez que comienzan a creer en el dogma neoliberal, que, sin embargo a ojos de la adolescente era volver al socialismo pero con otro nombre. También refleja la avidez financiera que hizo que casi todos perdieran sus ahorros y muchas otras cuestiones y creencias que el entorno familiar le habían ocultado o maquillado.

   

                                                   

                                           Lea Ypi

 

   Llega un momento, precisamente cuando Lea cumple los dieciocho años, en el que todo explota en una guerra civil en el país. La novela finaliza con la huida de ella con su madre y una hermana hacia Italia en un barco al el que consiguen subir, y el reflejo de la tristeza  del padre que se queda en el país y fallece poco después.

   El gran mérito de este libro, desde una perspectiva narrativa, es que logra emplear el molde novelístico para explicar la vida en un país al que la propaganda consideraba el mejor de los mundos posibles, un país en el que decorar una casa con un bote de Coca Cola vacío era un gran signo de distinción. Lea Pi logra contar esta historia, con múltiples detalles de la vida familiar, primero desde la perspectiva de una niña y más tarde como adolescente curiosa, que se convierte en incansable cuestionadora de lo que significa ser libre. Y lo hace con gran lucidez y con un estilo de prosa soberbio.

   Un epílogo, escrito en el presente de la autora, sobre lo que entiende como profesora por socialismo como una teoría sobre la libertad a través de la historia, y aplicada a su familia, pone el broche final a este libro que se lee con placer